En los años 2007 y 2008, un grupo de personas viaja a Ruanda y se inicia el primer contacto en la población rural de Rukara. Después de un año de trabajo y tras un proceso participativo, se decide emprender un proyecto educativo con el que aprender, cooperar y transformar una parte de nuestro entorno.

2010

Contactamos con una educadora ruandesa que comienza la sensibilización con un grupo de 33 jóvenes de Rukara, analiza con ellos/as sus necesidades y elaboran una propuesta de actividades educativas que más tarde se convertirá en el proyecto pedagógico de Mil Colinas.

2011

Se registra la Asociación en España. Durante un año, se trabaja conjuntamente en Rukara para conformar el equipo educativo que desarrollará el proyecto pedagógico y la escuela.

2012

Comienza la actividad de Mil Colinas en España, con pequeñas colaboraciones, que centran su foco de atención en Madrid.

2013

Viajan a Rwanda las/os primeras/os voluntarias/os de Mil Colinas, que pasan un mes en Rukara en un intercambio cultural lleno de aprendizajes. Comienzan las colaboraciones con entidades educativas.

2014

Participamos en nuestra primera campaña de sensibilización junto con otras entidades.

2015

En Rukara, compramos el terreno de lo que será la futura escuela de Mil Colinas y celebramos con una gran fiesta el primer grupo de graduadas/os en Secundaria de Mil Colinas. En Madrid tenemos la 1ª Reunión de Voluntariado de Mil Colinas en la que comenzamos a organizarnos y compartir responsabilidades.

2016

Celebramos el 1º Encuentro con Colaboradoras/es de Mil Colinas para dar a conocer a fondo el trabajo realizado durante los años que llevamos trabajando. ¡Celebramos 5 años!

2017

Comenzamos a formar un Equipo consolidado de voluntarias/os. En Ruanda, celebramos que la primera joven de Mil Colinas se gradúa en la universidad.

2018

 

2019

 

 

2020

2020

204 menores y jóvenes forman parte de Mil Colinas en Rukara. Nuestra familia sigue creciendo…

 

En Ruanda, creamos, a través de un proceso participativo, la ONGD Urubuto, que significa «semilla» y «fruto», con la que trabajaremos de forma conjunta, como venimos haciendo desde 2011.

 

Iniciamos la construcción de nuestro propio Centro Educativo, Social y Cultural. Además de un lugar en el que se lleven a cabo a las actividades de la asociación, será un espacio de libre acceso, autogestionado y abierto a la participación comunitaria.